Te proponemos una de las experiencias más especiales e intensas del Sur de Andalucía. Una vivencia que gira en torno a una bella localidad, Grazalema, y un elemento, el agua, que la moldea y da vida desde sus orígenes.

Y es que, aunque que te pueda parecer extraño, es aquí, en el pueblo que da nombre al Parque Natural Sierra de Grazalema, donde se registran los mayores índices pluviométricos de toda España.

Lluvias, muy copiosas, cuya huella es muy visible en el espectacular entorno natural de Grazalema, en el que, entre otras joyas, localizamos uno de los mayores tesoros botánicos de Andalucía y el mundo, El Pinsapar; bosque en el que habita el único árbol que, junto a musgos, helechos y líquenes, fue capaz de sobrevivir a la última glaciación alpina.

Pero la presencia del agua también está muy presente en las calles y plazas del bello casco histórico del que es uno de los pueblos más bonitos de España. Nada menos que medio centenar de fuentes de piedra, cantería y bronce (Aguafría, Plaza de España, Algarrobal…) nos regalan el trago más fresco y puro de este privilegiado rincón.

Agua que también es protagonista de su singular lavadero, ese en el que las mujeres compartían jornadas interminables para dar lustre a la ropa de familias, o de su afamada fábrica de mantas, donde el agua era energía indispensable de sus telares.

Antiguo lavadero público de Grazalema